Desde que la australiana Margot Robbie apareció en la memorable escena sexual de «El Lobo de Wall Street» las búsquedas de Google de esta actriz de Hollywood se han multiplicado. La película de Scorsese la retrataba con un desnudo de lo más explícito (se veía perfectamente su vagina depilada) momentos antes de consumar acto carnal con Leonardo Dicaprio, el cual se corre a los pocos segundos por motivos más que obvios. Una escena en la que según comentó en posteriores entrevistas se sintió de lo más incómoda y avergonzada por haber follado, o simulado follar, en una película americana. A día de hoy no creo que se arrepienta de este polvo filmado, menos todavía sabiendo que la secuencia la encumbró como una de las famosas follando más populares de estos últimos años.
Otro momentazo que nos dejó la rubia más famosa del momento fue su desvestido en la película «Suicide Squad» (Escuadrón Suicida), una especie de striptease de lo más caliente que protagoniza su malvado personaje femenino Harley Quinn. En este film Margot es una sexy y despiadada asesina que se pasea semidesnuda por todo el metraje vistiendo tops y leggins ajustados mientras parte cabezas con su bate de beisbol. Casi nada.
La rubia explosiva se ha convertido en una sex symbol en un abrir y cerrar de ojos gracias a esa sensualidad comedida que posee, un rasgo que en estos tiempos vale su peso en oro ante toda la avalancha de cuerpos retocados pasados de sexualidad.
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